¿Sabías que los edificios y la construcción generan el 60 por ciento de la contaminación que existe en el planeta? Nos encontramos en un momento de crisis energética y de creciente concienciación medioambiental. Por ello, las viviendas sostenibles constituyen una aportación fundamental a un modelo de desarrollo sostenible.
El uso de materiales de construcción sostenibles podría reducir en un 50% la contaminación en las ciudades
El calentamiento global, así como otros innegables problemas de la humanidad y los grandes desastres naturales a los que asistimos cada vez con más frecuencia, son un mensaje que nos manda la naturaleza alertándonos de que debemos preocuparnos por la conservación de nuestro planeta. Las grandes ciudades cada vez concentran una mayor cantidad de población. Hoy se enfrentan a grandes desafíos tanto a nivel social como económico y medioambiental.
Afortunadamente parece que las cosas comienzan a cambiar muy poco a poco y todos los sectores sin excepción empiezan a tener presente esta realidad. El sector de la construcción y la vivienda no iba a ser menos. Desde hace algún tiempo empieza a hablarse cada vez más de las viviendas sostenibles pero, ¿qué son exactamente?. ¿Cómo podemos tener una y como se está adaptando este sector a la sostenibilidad por la que tanto se aboga? En este post te explicamos todas las claves. ¡Toma nota!
Qué es una vivienda sostenible
Una vivienda sostenible es aquella que aprovecha todos los recursos disponibles para reducir el consumo energético respetando el medio ambiente y
contribuyendo a la reducción de la factura doméstica. Para poder decir que una vivienda es sostenible hay que tener en cuenta una serie de elementos fundamentales que son:
- La ubicación: es un punto fundamental. La orientación debe ser siempre de manera que se saque provecho al máximo posible las condiciones del entorno como la luz, el agua, etc
- El uso de materiales de construcción: debe basarse en materias primas ecológicas garantizando el aislamiento como la piedra o el corcho. Un aspecto fundamental será el tema de la instalación de unas buenas ventanas, ya que es el lugar por donde más energía se pierde en nuestro hogar.
- Otro punto importante para tener una vivienda sostenible será el uso de fuentes de energías limpias. Esto se puede conseguir instalando placas solares o sistemas de calefacción eficientes como suelo radiante.
- Además de todo esto, contar con un buen sistema de ventilación será fundamental para evitar la estanqueidad del aire
- Otro aspecto clave y que ya puedes empezar a aplicar, será el uso de electrodomésticos eficientes. Estos permiten un ahorro de más de un 50% en muchos casos. Además tendrás que acondicionar tu vivienda con un sistema de iluminación de bajo consumo.
La Unión Europea ha marcado una serie de directrices de cara al año 2030 en el sector de la construcción orientándolo hacia materiales y componentes con menor necesidad de materias primas. Por lo tanto, con una menor dependencia de recursos naturales. Seguro que te estarás preguntando cuáles son las ventajas que tiene esto para ti. Pues bien, por una parte podrás reducir tu impacto ambiental y por tanto contribuir a cuidar del planeta. Además, podrás disfrutar de un mayor confort y calidad de vida y reducirás tu consumo energético y lo que conlleva un ahorro económico. ¿Qué más quieres?
Cómo puedo tener una vivienda sostenible
Técnicas arquitectónicas aparte, cada uno de nosotros puede hacer una gran cantidad de cosas. Hay que tener en cuenta determinados aspectos para aportar nuestro granito de arena a la conservación de los bienes naturales del planeta. ¡Eso podemos hacerlo a través de la construcción de nuestras viviendas!
Te dejamos estas pautas sobre cómo construir una vivienda sostenible.
Ventanas grandes y pequeñas
Si el clima de tu casa es cálido deberá tener ventanas grandes. Para no tener que estar todo el día con el aire acondicionado encendido incluye grandes ventanales en la construcción de tu casa. De esta manera circulará mayor cantidad de aire natural en tu casa y la sensación de calor disminuirá considerablemente.
Las ventanas son una parte de nuestra casa por donde más perdemos energía. ¡Revísalas!
Si por el contrario el clima es frío deberás tener ventanas pequeñas. Si puede ser de madera mejor ya que se trata de un material que aísla mejor y más rápido. Estas disminuirán las entradas de corrientes frías.
Suelo radiante
Para poder tener una casa confortable en los momentos de frío o en este tipo de climas existe una opción ecológica: suelo radiante eléctrico. Está especialmente recomendado para casa que cuentan con paneles solares y fotovoltaicos
Energía solar
Tener una casa con placas solares en el techo es una excelente manera para ahorrar energía y producir electricidad de una forma limpia en tu hogar.
Iluminación de bajo consumo
Ahorro energético + menor impacto ambiental = Bioclimatismo
¿Que es una vivienda bioclimática?
¿Habías oído hablar del bioclimatismo? Una vivienda bioclimática es aquella que aprovecha los recursos naturales y evita el consumo de energías convencionales. Mediante su configuración arquitectónica puede satisfacer las necesidades climatológicas de sus habitantes. Además, una casa bioclimática hace que estemos frescos en verano y calentitos en invierno. Este tipo de viviendas guardan el calor, aunque la temperatura exterior sea muy baja.
Los edificios y la construcción acaparan el 60 % del consumo de materiales y energía. Además suponen la mitad de los residuos y contaminación que se producen en el planeta
Se trata de una tendencia arquitectónica relacionada con la vivienda sostenible y existen dos tipos: pasivo y activo. El bioclimatismo pasivo aprovecha las condiciones naturales con el objetivo de disminuir lo máximo posible las necesidades energéticas de la casa. Sin embargo, el bioclimatismo activo está formado por un conjunto de sistemas que se pueden incorporar en una casa con el mismo objetivo para aumentar su eficiencia energética.
El bioclimatismo no es algo nuevo, es algo que se ha practicado desde muy antiguo y que fueron descubriendo en las áreas rurales. El descubrimiento de la orientación de la casa fue una de las primeras cosas y con el paso del tiempo se fueron perfeccionando las técnicas. Como por ejemplo arcadas en la parte frontal de la casa, tejados de césped o ventilación cruzada. Sin embargo, con la llegada de la industrialización y la construcción masificada de viviendas se empezó a dejar de lado el uso de estas prácticas.
A pesar de todas sus bondades, se trata de un tipo de vivienda poco extendida en la actualidad. Aunque no existe ningún registro específico, en España se calcula que hay entre 500 y 1000 edificios de este tipo. Según datos del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT).
El ahorro energético es una de las principales ventajas de este tipo de viviendas además de la reducción del impacto ambiental. Además proporciona un mayor confort de sus habitantes y una mayor iluminación natural. Este menor consumo se traduce en un ahorro económico, que se calcula en un mínimo de 1000 euros anuales. Si estás pensando adquirir una vivienda bioclimática, infórmate bien de su funcionamiento y averigua si en tu comunidad autónoma o ayuntamiento ofrece algún tipo de subvención. ¡En TDS podemos ayudarte!
El sector de la construcción, el rey de la contaminación
Cuando hablamos de contaminación, el sector de la construcción ocupa el primer lugar en el ranking de las actividades que más contaminan en el mundo. Se debe fundamentalmente al consumo de recursos naturales y energía que necesita. Además hay que tener en cuenta el uso de materiales que tradicionalmente ha empleado en el desarrollo de su actividad como el acero, hormigón, amianto y gases. Son altamente contaminantes llegando incluso a provocar enfermedades en las personas. Actualmente ya se está trabajando sobre esto. El sector inmobiliario avanza hacia un modelo en sintonía con el medio ambiente y se buscan alternativas para reducir los índices de contaminación del sector. Estas pasan sobre todo por el uso de materiales naturales. El uso de materiales de construcción sostenibles podría reducir en un 50% la contaminación en las ciudades. Pero, ¿cuáles son estos materiales de construcción sostenibles?
En cuanto a materiales de aislamiento ya podemos encontrar paneles de fibras de madera y fibra de celulosa de papel reciclado. En materiales para la construcción ya se empieza a utilizar barro cocido, piedra natural o madera. En cuanto a materiales para instalaciones destacan los termoplásticos como alternativa al PVC como el polipropileno o polietileno.
Uno de los principales retos del sector pasa por que las obras de construcción no supongan una amenaza para la salud de los ocupantes y vecinos. Además se pretender reducir su impacto durante todo el ciclo de vida: construcción, uso y demolición.
Desde la UE ya se analiza la propuesta de crear lo que se llama un producto hipotecario de eficiencia energética. Este permitiría a los compradores de casas eficientes energéticamente, mejores tasas de interés o capital adicional o comprometerse a mejorarlas mediante su rehabilitación energética. Tras la cumbre del Clima de París de 2015, se ha puesto el punto de mira en estos asuntos. Los datos actuales, las emisiones y los cambios en el clima avalan la necesidad de disponer de una construcción más respetuosa con el medio ambiente. En este sentido, la innovación jugará un papel esencial.
Certificado de eficiencia energética: ¿es suficiente?
Al hablar de viviendas sostenibles son muchas las personas que piensan que con tener un certificado de eficiencia energética es suficiente para tener una casa respetuosa con el medio ambiente. Sin embargo, disponer del certificado de eficiencia energética no implica un ahorro energético inmediato. Este certificado lo que nos aporta es una información fundamental para poder empezar a ahorrar. Para poder ahorrar energía y como consecuencia dinero, lo primero que debemos hacer es saber cómo es nuestro inmueble. Solo a partir de esta medición se podrá determinar cómo podemos ahorrar energía. Toda esa información es lo que nos aporta este certificado. Nos indica las principales características constructivas y varias medidas para ahorrar energía
En el certificado energético se califica el inmueble entre el A (más eficiente) y el G (menos eficiente) y, al igual que los electrodomésticos, que a mejor calificación implican menor consumo eléctrico y de agua, en los edificios ocurre lo mismo, a mejor calificación, menor energía será necesaria para alcanzar el confort.
¿Sabías que el Certificado de Eficiencia Energética es obligatorio para realizar cualquier compra/venta, y determinados alquileres, de inmuebles?
En TDS nos encargamos de realizar estas inspecciones. Si tienes algún tipo de duda, consúltanos sin compromiso, estaremos encantados de atenderte.